Lo que aprendí de Levenson y que puede ayudarte en tu psicoterapia.
Hay varios elementos en los que estoy de acuerdo con el autor y que creo que os pueden ser de ayuda en el trabajo tan creativo y siempre complejo que tenemos, la psicoterapia.
– Uno de los elementos con los que me identifico es con la búsqueda del código del paciente. Seguramente porque es algo de lo que Cencillo también habló y que compartiré con vosotros más adelante. Levenson considera que el paciente no está simplemente equivocado porque no está viendo, lo que sea, como nosotros. Y este paso es un gran paso, y lo es porque viene de un modelo ortodoxo en el que se le imponen las explicaciones al paciente, explicaciones que debe aceptar porque sino se está resistiendo. Seguramente el autor es uno de los primeros, junto con Ferenczi o Cencillo, en decir que hay que escuchar lo que el paciente tiene que decir, que no se debe imponer una teoría o una hipótesis por muy buena que sea, que debemos negociar. Nos ha costado, pero hemos conseguido que el paciente sea el centro del tratamiento y no el modelo. Levenson ha sido uno de los que ha ayudado a dar este paso, a él hay que agradecérselo.
– El método deconstructivo, no es exactamente lo que yo utilizo, pero sí hay características de su forma de trabajar que te serán útiles. No te dejes arrastrar por las hipótesis de entrada, está bien tenerlas, es necesario tenerlas, pero deben ser tan flexibles o tan manejables como para poder ser modificadas a partir de los datos que aporta el paciente. Podemos pensar que un acontecimiento debió resultar traumático para ese paciente en concreto sí, podemos explorar si fue así, también, pero no nos podemos quedar enganchados si los datos y el paciente nos muestran que no, que no fue traumático, que pasó y lo superó. Difícil, no es imposible.
– Seguramente sea su forma de relacionarse con el paciente la que más me engancha a ese autor, colocando la posibilidad por delante de la certeza siempre, la percepción del paciente no sólo es relevante, es real, no temo ponerme en juego, no temo disculparme si he dicho algo inapropiado o hiriente, aunque no haya sido mi intención. Este tipo de cosas convierten la relación en una relación humana y auténtica, algo de lo muchos pacientes carecen en su vida diaria. Y por supuesto, la inmersión, es cierto que acabamos jugando los papeles que los pacientes necesitan, no podemos escapar de que se repita con nosotros y con la forma de trabajar, debemos encontrar una salida, generalmente algo que nadie ha conseguido hacer antes. Por eso os decía arriba que nuestro trabajo es un trabajo creativo, de hecho si tratas de trabajar siguiendo los mismos caminos una y otra vez con los diferentes pacientes, te encontrarás atrapado, y esta vez, sin salida. Cada tratamiento es un mundo, cada paciente es un mundo.
– No podemos escapar a nuestra propia influencia dentro del proceso, por eso lo único que podemos hacer es ser auténticos, no podemos ser nada más que nosotros mismos para poder generar confianza en el otro, aceptando nuestras propias limitaciones y nuestros errores.
– El concepto de mistificación no es algo coherente para mi, con todo lo demás, la mistificación es como una especie de paso atrás en una forma de ver el mundo por otro lado totalmente relativista. Con la que tampoco estoy 100% de acuerdo. Sí me gusta de la mistificación una tendencia que se encuentra muchas veces en los pacientes, que es la de proteger a quienes les rodean, es real que nos acoplamos a las formas de hacer de quienes nos crían. Pero es una interpretación eso de proteger al otro, los bebés no se amoldan a las relaciones con sus cuidadores por protegerles sino porque es lo que estamos preparados para hacer en el mundo, sobrevivir dentro de él. Aprendemos en y de un contexto relacional y construimos esquemas que nos acompañarán en el futuro, a veces para bien, a veces para mal.
Estas ideas son las que han enriquecido mi práctica clínica por el contacto en este autor, su manera de ver la psicoterapia es muy rompedora y particular, al mismo tiempo, muy auténtica y real, desarrollando relaciones reales con las otras personas, no imponiendo un criterio o una teoría. Supongo que es eso lo que más me gusta de él, y creo que su obra puede aportar mucho. Os animo a leer mis posts sobre el autor, y a acercaros a su obra.
Posts sobre Edgar A. Levenson:
– Edgar A. Levenson. Uno de los mejores psicoanalistas de su generación.
– ¿Por qué es tan difícil entender a Levenson?
– Las dos herramientas de trabajo para el psicólogo según Levenson.
– ¿Qué sucede en la relación terapéutica según Levenson?
Espero que te haya servido de ayuda este post.
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Lorena Parra. Psicóloga Valencia.
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