¿Por qué es tan difícil entender a Levenson?

Este post es sin duda, un post para valientes. Adentrarse en el pensamiento de Levenson es difícil pero sus ideas son tan útiles, ayuda tanto a comprender cómo ha evolucionado la psicoterapia y qué elementos tenemos ahora en cuenta que antes no, que vale mucho la pena.

El pensamiento de Levenson es un pensamiento complejo, lo es porque parte de lo que ha sucedido en la ciencia a lo largo del tiempo. Es decir, cómo las explicaciones que damos al mundo son las propias de un modelo concreto en un tiempo y lugar concreto, y cómo esas explicaciones cambian y se reorganizan en un nuevo orden que ya no es un desarrollo lineal del pasado. Basado en la visión epistemológica de Kuhn, Levenson aplica esta misma idea al desarrollo del modelo psicoanalítico centrándose en el concepto de estructura. Considera que si hemos perdido el nexo entre la causa y el efecto, si los acontecimientos y sus consecuencias están influidos por tal cantidad de variables que no podemos relacionarlos de forma previsible, entonces debemos centrarnos en la estructura.

El estructuralismo para Levenson supone ese cambio de paradigma necesario como consecuencia de lo dicho, el mecanicismo no es posible, no podemos relacionar ni predecir, así que basándonos en la idea de que el mundo es un lugar coherente y organizado, nos quedamos con la forma en la que se ordena. Sin embargo, la estructura no es directamente apreciable, entonces debemos centrarnos en el concepto de globalidad, cada objeto forma parte de un sistema, todo se entiende en su contexto. Y ya que esta globalidad existe, y no podemos extraer los elementos propios del sistema para estudiarlos por separado sólo nos queda estudiar las relaciones que se establecen entre esos elementos, para que ese estudio refleje la estructura que subyace al orden en el que están insertos. El contenido ya no es lo esencial, sino las relaciones entre los elementos, relaciones que permanecen en tanto el contenido puede ir variando.

Los acontecimientos que le suceden a alguien van siendo acomodados a la estructura que ya tiene su experiencia, así que parece que no hay nada nuevo, a esto lo denomina autoperpetuación.

Teniendo en cuenta estas ideas el psicoanálisis también está inserto en su tiempo y lugar así como nuestros conceptos de qué hacemos o quienes somos dentro de esta profesión. El paciente debe ser analizado como si de una estructura se tratase, ya que posee una estructura propia procedente de sus experiencias, junto con la estructura que compartimos por pertenecer al mismo momento histórico.

Considera, al mismo tiempo, que si la tendencia de la estructura es a autoperpetuarse, ¿cómo podemos ayudar a modificar este sistema? Hay que comenzar por reconocer que estamos atrapados en nuestro tiempo y lugar y al mismo tiempo buscar el código presente que nos permita acercarnos a la estructura del paciente.

Las estructuras tienden a autoperpetuarse, van siempre hacia el mismo sitio, el paciente va a repetir con nosotros los mismos pasos que siguió siempre, nuestra labor no consiste en evitar que esto se dé, sino en ayudar al paciente a desenredarlo. Podemos darnos cuenta de entrada cómo afecta esto al modelo clásico del psicoanálisis, paciente y terapeuta, el modelo mismo, dependen del momento histórico en que se encuentran. Para ayudar al paciente debemos tener en cuenta el contexto en el que está inserto, un contexto al que ahora también pertenecemos por ser sus analistas. No podemos observar al otro desde el exterior, observamos desde quienes somos.

En mis siguientes posts os contaré cuáles son las repercusiones que estas nuevas ideas aplicadas a la psicoterapia van a tener en la forma en la que vemos pacientes. Eso sí, prometo solemnemente que será menos difícil.